DESCRIPCIÓN Y FUNCIONALIDAD

El desaparecido castillo de Gironella fue la evolución y la consecuencia estructural de una fortificación, llamada central, de un feudo que ocupaba gran parte del término de Gironella cerca del río.

El castillo de Gironella se construyó bajo el mandato de los señores de la Portella, los primeros barones de Gironella desde el siglo XI, puesto que en el testamento de Bernat Guifré de la Portella, el barón dio los dominios de todo el término a su hijo Bernat. El objetivo de esta construcción fue la de proteger todos sus dominios en la zona del Llobregat, dado que el castillo de la Portella quedaba bastante aislado de este término. En el siglo XIII, Gironella ya se convertía en un foco económico y de comunicación territorial muy importante.

Los barones construyeron una gran fortaleza sobre la roca de la ribera del río para controlar el valle del Llobregat entre los dominios templarios (Puig-reig) y los reales (Casserres y Berga); la situación del castillo también sirvió para controlar el antiguo camino de la sal (de Serrateix a Ripoll). De este modo, los Portella, caracterizados por su afán de expansionismo, contribuyeron súbitamente al desarrollo económico y político de la época feudal berguedana. Los territorios que dominaron les permitieron crear una importante red de comunicaciones entre el Llobregat y Osona. Gironella, tomó, poco a poco, tanta importancia como el castillo de Lluçà tenía para el sector oriental.

Poco a poco, el castillo fue formando parte de una fortaleza –que también controlaba el término de Olvan– y que fue necesaria cuando aumentaron los problemas entre el matrimonio de Bernat de Saportella y Elisenda de Lluçà contra el obispo de Vic. Gironella se iba conformando paulatinamente, pero lo empezó a hacer de manera estable cuando el rey Jaume I ordenó la destrucción del castillo de la Portella y los barones decidieron no reconstruirlo para invertir en el creciente y estratégico castillo del Llobregat. A partir de aquel momento, un pequeño casco urbano se formó dentro de la línea de muralla, alrededor del castillo y de la iglesia de Santa Eulàlia. La primera documentación de Gironella o Gerundella es de 1222 como un pequeño núcleo de casas, pero en el s. XIV se documenta como un grupo de casas, lo cual es bastante relevante teniendo en cuenta que antes de este siglo, el término estaba poblado exclusivamente de masías.

A partir de entonces, el castillo fue sede de las tres baronías que dominaron Gironella a lo largo de la historia: la de la Portella, la de Pinós y la de la baronía propiamente de Gironella. Sin embargo, la fortificación no fue nunca residencia habitual de sus señores, sino que más bien era un punto neurálgico y de defensa donde frecuentaban más o menos temporadas los diferentes linajes.

La parte que se conserva actualmente es prácticamente nula porque el castillo fue destruido e incendiado en más de una ocasión –durante la guerra de Sucesión, los Borbones ocuparon el castillo y, más tarde, cuando el marqués de Poal y Ermengol Amill lo recuperó, el hermano del marqués ordenó la destrucción de la fortificación para que nunca más fuera arrebatada. La última destrucción y quema fue durante la primera Guerra Carlista–. Ante estos hechos y con el paso del tiempo la estructura se fue modificando reaprovechando las ruinas y se convirtió en Vicaría y en casa Consistorial. Actualmente, es el Ayuntamiento.

USOS ACTUALES

• Des del año 1985, el enclave alberga las dependencias del Ajuntament de Gironella.
• Bien Cultural de Interés Nacional (1949)